Entrevista realizada por Finito Reigada Zamarro a los miembros de la asociación sin ánimo de lucro “Terra Grovii.

¿Cómo nace vuestra asociación y con qué objetivo?

“Terra Grovii” es una asociación sin ánimo de lucro compuesta por 5 personas Víctor, Brenda, Daniel, Patricia y Fernando. Nace a raíz de la primera excavación que se hace en el castro promovida por el ayuntamiento de Salvaterra de Miño en el año 2023.

–“Nosotros consideramos que esto es muy importante y para que no quede en el olvido decidimos crear la asociación, y así colaborar y difundir lo que se va extrayendo, dar a conocer este hallazgo que por su naturaleza y primeras investigaciones nos dimos cuenta que va más allá de un simple descubrimiento, en cada paso que damos encontramos cada vez más información y una historia enigmática e intrigante que nos da impulso para seguir adelante para querer descifrar el misterio que aquí se esconde y así conseguir que este castro tenga su lugar en la arqueología de España….”

¿Cómo empezó vuestro interés por los Castros?

“Bueno, todo comenzó a después de los incendios, del año 2017 que dejo al descubierto las grandes rocas que hay en la zona y asemeja una cueva, lo llamamos “EL CUBERTO” porque son dos grandes rocas laterales y una superior que hace como tejado semejando una cabaña por estar superpuesta encima como una cubierta, de ahí el nombre que le pusimos. Entre dos huecos de ese Cuberto, hay una extraña roca metida hacia adentro orientada hacia arriba como si estuviese acostada que se asemeja a una cabeza con las fracciones de un ser humano durmiendo o algo parecido.

Lo sorprendente es que en cierto momento del año, queda iluminada solamente esa piedra por la luz del sol durante unos minutos y es alucinante, porque parece que fue puesta allí con algún propósito, ya que creemos que es demasiada casualidad.

Y a partir de ahí, se le comunica el ayuntamiento que después de unos trámites, trajeron un arqueólogo y empezamos a descubrir, petroglifos, morteros para mineral, cabañas restos de tegulas, etc. Una barbaridad de cosas, 40 más o menos de momento.

Ahora la pregunta es; ¿Qué nos puedes contar sobre este descubrimiento?

La excavación que se hizo hace dos años ha dado un resultado espectacular, aparte de lo que se encontró en el “Cuberto” descubrimos unas rocas donde había un petroglifo, que es el único estaba registrado en patrimonio, como un petroglifo que lo catalogaron como que había sido desplazado, ya que apenas se veía y parecía estar aislado. Pero la excavación posterior ha demostrado que no, al retirar la tierra se fue descubriendo que se trata de una cabaña “Castrexa” bastante profunda de forma circular y dentro están las dos rocas que ocupan gran parte de la misma, suponemos que las paredes se construyeron posteriormente para protegerlas ya que aquello seguramente era un santuario de la edad de bronce.

No le encontramos sentido que fuese una vivienda ya que las rocas no dejan espacio para utilizarla como tal, por eso y por lo que hay tallado en su superficie llegamos a la conclusión del santuario.

¿Hubo contactos con personas cualificadas para llevar a cabo investigaciones?

Sí, fue todo a través del ayuntamiento como se dijo antes, y que ha pedido la subvención y tiene la cesión del monte. Luego llamaron fue cuando llamaron al arqueólogo, Francisco Herves, Él es quien que ha llevado la excavación y va catalogando lo que se va descubriendo. El ayuntamiento se ha implicado desde el principio, la obra y la búsqueda, inversión y la empresa. Todo el trabajo técnico ha sido suyo.

Nosotros nos hemos unido después de esa intervención para apoyar todo esto porque para nosotros es importantísimo. Colaboramos en la excavación y por eso sabemos tantas cosas, hemos siempre estado ahí para difundir y darlo a conocer y para limpiar y restaurar todos los caminos que había por el castro que después de los incendios quedaron abandonados, así le damos al lugar visibilidad y poder transitar para que las personas interesadas puedan visitarlo en condiciones y con mayor seguridad.

¿Y qué recursos tenéis para que este hallazgo se divulgue por el mundo?

Los medios que tenemos básicamente son las redes sociales y las visitas guiadas que hacemos y han tenido bastante éxito ya que la gente se apunta y muestran interés por y visitar el lugar generalmente por la noche que con linternas se aprecian estupendamente las figuras de los petroglifos se proyecta la luz perpendicular y así las sombras marca muy bien sus características, también les vamos contando toda la historia que conocemos y desde luego que las personas que participan se van entusiasmadas con experiencia. Cerca de 3 horas lleva el recorrido, pero vale la pena.

De día no es posible apreciarlas tan definidamente.

¿En las parroquias cómo lo valoran tener tan cerca de casa este descubrimiento? ¿Qué les parece importante?

Hay dos respuestas a ese descubrimiento.

Una es, la gente que se ha criado ahí y no le dieron valor por diferentes motivos, y otra de la gente que si, se ha dado cuenta de este importante hallazgo, hay una curiosidad de que muchos creían que lo conocían bien porque vivieron ahí de toda la vida, pero la realidad no es así, lo que nos cuentan no es lo mismo que lo que vamos investigando.

Ellos solo veían lo superficial, sabían que estaba ahí, pero no tuvieron oportunidad de estudiarlo, no podían imaginar la magnitud de lo que realmente hay debajo y que vivió con ellos desde siempre.

Lo cierto es que ahora nos apoyan y están encantados de ver la historia que vamos descubriendo y mucho que queda por contar.

¿Que podríamos destacar, para que tenga un impulso de curiosidad y el público venga a conocerlo, in situ?

-Aquí tenemos, tres puntos fuertes,

-La complejidad del yacimiento, porque no es solo un castro, o un poblado en el que se ha hecho la investigación arqueológica, sino que hay una villa romana, y creemos que dos más, y luego el propio castro, los “Penedos, dos Mouros“ que más que un pueblo, casi se puede considerar toda una ciudad, porque estamos hablando de cuatro hectáreas de superficie, con cuatro murallas diferentes, dos terrazas, una croa con un anillo que la rodea y luego dos terrazas por debajo. Entonces, tenemos eso, la complejidad del yacimiento, entre la villa romana, los castros, luego tenemos el punto religioso, espiritual, de la cabaña.

Todo lo relacionado con los petroglifos, con la estela, el tema del santuario, esto que está en investigación.

El castro, seguramente era un monte sagrado, especial, por la cantidad de petroglifos que hay, que no se sabe su antigüedad con certeza, pero vamos, puede ser neolítico o anterior. Antes de ser un castro, podría haber sido un lugar sagrado, la excavación es una pasada, porque nos muestra un sitio de ritual.

No conocemos nada parecido en la península ibérica. La cabaña tiene dos alturas, con una escalera, que bajaban supuestamente para hacer un ritual que desconocemos.

No distinguimos ninguna sin puerta, entraban por una rampa, bajaban por una escalera, quedaban debajo de una piedra que está tallada, que en principio suponemos que es de la edad de bronce, por los elementos que aparecen tallados.

Es algo espectacular que no existe en ningún lugar. Por eso hay que venir a verlo, porque no hay nada parecido.

Y el tercer elemento a valorar es un tema minero, ya posterior a todo este tema de la estela y de la cabaña. Es el tema minero del oro, que, eso no afecta solo al castro, sino a toda la superficie del Baixo Miño y, bueno, gran parte de la superficie de Galicia. Prácticamente todo el recorrido del Miño es una gran mina de oro. Pero aquí, en esta zona en concreto, se concentra una densidad de restos mineros que aún está por descubrir. Desde “Furnas”, galerías de conducción de aguas mineras, estructura de ágoras o pozas de bateo… Hay un conglomerado minero que también da un poco de fundamento, al porqué, de una villa romana aquí, podría ser como control de estas minas, que, bueno, están por descubrir, pero es junto con el lado espiritual, el punto más llamativo de todo este yacimiento.

Esto es muy antiguo. ¿De qué edades podemos hablar?

El arqueólogo ha encontrado una serie de restos cuya antigüedad puede rondar los entre los 10.000 y 15.000 años Es decir, esto ha sido habitado prácticamente desde el principio de las civilizaciones neolíticas. Y creemos que paleolíticas también. Pero estamos hablando de, mínimo, 15.000años que pueden tener estos restos arqueológicos. Y luego también tenemos restos de cerámica del siglo XV, toda una serie de elementos que nos tiene intrigados y nos gustaría resolver por qué intuimos que esto va dar mucho de sí y creemos que las próximas excavaciones nos darán la razón.

COMO TODO LUGAR ENIGMÁTICO NO PODÍAN FALTAR LAS LEYENDAS.

LA LEYENDA DE LA MOURA

La leyenda de la Moura es una narrativa popular en Galicia que involucra a un ser mítico femenino, generalmente estas mouras suelen habitar en castros, cuevas, fuentes o ríos, y son conocidas por custodiar tesoros escondidos, especialmente peinando sus largos cabellos con peines de oro. Las historias sobre las mouras a menudo incluyen elementos de tentación, encantamiento y recompensas o castigos basados en la interacción con humanos, especialmente jóvenes que guardan ganado.

“Había una Moura muy fea que salía a peinarse solamente por la noche, se ponía encima de un “penedo”(Roca) que hemos encontrado, por sus características semeja una silla, la llamamos “La silla de la Moura.”Allí era donde se peinaba con un peine de oro, pero a veces y se le caía entonces la Moura pedía ayuda, si pasaba un viandante o te acercabas a la roca donde ella estaba, te decía;

– “Acércame el peine “

Entonces había que tener mucho valor para acercarte y darle el peine a la Moura.

Vivía en las cavernas la pinta que tenía era muy espantosa. Lo normal es que salieras corriendo, ni caso a la Moura por el miedo que infundía. Entonces la Moura se enojaba, te hechizaba y te convertía en piedra.

Pero si tenías lo que tenías que tener, te acercabas y le dabas el peine, la Moura te recompensaba con una bolsa de monedas de oro…

Demasiado terror les debió dar a los que llegaron a verla porque nunca se supo que nadie consiguiera la bolsa de monedas de oro.

También cuentan la leyenda de las 7 ánforas. Contaba un vecino que escondidas en unas rocas había 7 ánforas con veneno que `para envenenar las 7 parroquias y ánforas y otras 7 llenas de oro una riqueza incalculable, si pretendías hacerte con ellas era cuestión de suerte acertar la que tenía el oro, también te podía tocar la del veneno…

Se da un caso que el cura de Lourido, ya antes de la guerra civil española se creyó lo del oro y se fue allá para dinamitar las rocas con los vecinos para buscar ese oro, aún se conservan los agujeros que hicieron en las rocas. Al final nunca lo consiguieron.

2 thoughts on “Cuando la tierra habla en gallego: entrevista a Terra Grovii

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