19 marzo, 2024

Agradecimientos a Amparo Álvarez Barros y Finito Reigada Zamarro por organizar y acompañarme en esta visita.

Hace poco, visité un enclave mágico. Estaba lloviendo, y creo que las gotas que caían del cielo gris añadían un toque melancólico a mi visita que posiblemente aumento la sensación de magnificiencia de este lugar. Me paré en la puerta del santuario, respire hondo y entré para ver el sepulcro de la mártir Santa Mariña.

En pocos documentos que existen sobre la vida de esta Santa se cita su nacimiento en el año 123 d.C., y el año 138 el de su martirio. Estos hechos nos llevan a los tiempos del emperador Adriano, la época de romanización y cristianización de Galicia.

Hija de un gobernador local romano de Limia era huérfana de madre al nacer que fue entregada al cuidado de una aya. Aquella buena mujer, era cristiana y con su estilo de vivir transmitía su fe a la niña Mariña. Cuando su padre se enteró de que ha sido bautizada por voluntad propia, la abandonó en la aldea de Piñeira de Arcos junto con su aya.

El prefecto romano Olibrio, de paso hacia el castro Presidium de Armeá, casualmente conoció a la muchacha y se enamoró de ella y la acosó hasta la muerte; con halagos primero, con razones después, terminando con las torturas hasta privarla de vida. Ante aquella autoridad romana, ella defendió su derecho a existir como mujer cristiana y virgen. Enfurecido, Olibrio, la conduce a juicio y es condenada a muerte; a ser decapitada como cualquier ciudadana romana.

La ejecutaron fuera del poblado en el lugar donde emerge actualmente la Capilla de Santo Tomé y que antes solo era un bosque.

Ermita de Santo Tomé

Cuenta la leyenda que al caer su cabeza al suelo, manaron tres fuentes de aguas milagrosas. Dicen que el agua de las fuentes continúa manteniendo su virtud sanadora y reconfortante. En la Ermita de Santo Tomé podemos ver el retablo del altar que representa la decapitación de la Santa.

Pero lo más interesante que tiene esta ermita es el pozo de la Santa, donde siguen acudiendo los devotos que se han visto reconfortados y aliviados de sus enfermedades, angustias y penas. Siguen portando el agua del pozo a sus casas, aspergiendo o lavando con ella a los enfermos. Yo no cogí el agua del pozo porque no llevaba ningún recipiente para poder llenarlo y llevar a mi casa. Nunca se sabe cuando necesitas un milagro.

Pozo de Santa

En el exterior del templo, encontramos la imagen de Santa Mariña situada en la fuente de tres caños, promovida por el obispo Iglesias Lago en el año 1840.

Los escasos datos sobre los primeros siglos de la iglesia da Aguas Santas plantean más dudas que certezas. Las referencias documentales más antiguas que se conservan son del siglo XI y relatan que la iglesia de Santa Mariña fue atendida inicialmente por una comunidad de clérigos regulares, quizá benedictinos.

En el templo hay tres imágenes de Santa Mariña.

En el camarín del sepulcro.

Sarcófago de la Santa Mariña

En el altar mayor.

Y la procesional, que parece ser la preferida de los lugareños.

Todas integran los mismos elementos simbólicos: vestidas con túnicas azules (color del cielo), cubiertas con mantos rojos (la sangre vertida por el martirio en amor a Jesús), portando en la mano derecha una cruz (indica cuál ha sido el sentido de sus vidas) y en la izquierda una palma (el símbolo de martirio). A sus pies un dragón (símbolo del mal).

Pero lo que más me llamo la atención es la capilla lateral del templo con la representación del Espíritu Santo muerto. Nunca vi nada parecido. No se sabe quien es el autor del retablo y que es lo que quería representar.

Este templo tiene un pequeño museo con interesantes tallas.

Y un rincón con algunos libros. Estos rincones siempre me parecen mágicos.

Al salir del pueblo me dirigí a otro lugar, no tan emblemático, pero importante – el Castro de Armea. De allí era ll prefecto romano Olibrio que se enamoró de Mariña y que la torturo por su amor.

Camino al castro Armea que nos lleva a otra historia

2 thoughts on “Santuario de Santa Mariña de Aguas Santas

  1. Qué buen resumen.
    Es un lugar mágico, como el Castro de Armea.
    Galicia tiene muchos lugares mágicos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *